Receta de galletas de mantequilla

Aquí te dejamos una receta básica para hacer unas deliciosas galletas de mantequilla, luego siempre puedes decorarlas consiguiendo unas galletas personalizadas únicas:

Ingredientes:

  • 225 g de mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
  • 150 g de azúcar glas (azúcar impalpable o azúcar en polvo)
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
  • 300 g de harina de trigo
  • Una pizca de sal

Instrucciones:

  1. Precalienta el horno a 180°C (350°F) y prepara una bandeja para hornear con papel encerado o un tapete de silicona.
  2. En un tazón grande, bate la mantequilla con una batidora eléctrica o una batidora de mano hasta que esté suave y esponjosa.
  3. Agrega el azúcar glas y el extracto de vainilla a la mantequilla. Continúa batiendo hasta que la mezcla esté bien combinada y esponjosa.
  4. En otro tazón, tamiza la harina y agrega la pizca de sal. Mezcla bien.
  5. Incorpora gradualmente la harina tamizada en la mezcla de mantequilla y mezcla hasta que se forme una masa uniforme y suave.
  6. Forma una bola con la masa y envuélvela en film transparente. Refrigera la masa durante al menos 30 minutos para que sea más fácil manipularla.
  7. Después de refrigerar, saca la masa del frigorífico y déjala reposar unos minutos a temperatura ambiente para que no esté demasiado fría.
  8. Espolvorea un poco de harina sobre una superficie de trabajo limpia y estira la masa con un rodillo hasta que tenga un grosor de aproximadamente 1 cm.
  9. Usa cortadores de galletas para dar forma a las galletas. Colócalas en la bandeja para hornear preparada, dejando un pequeño espacio entre cada galleta.
  10. Vuelve a refrigerar las galletas en la bandeja durante unos 10 minutos antes de hornearlas. Esto ayudará a que mantengan su forma mientras se hornean.
  11. Hornea las galletas en el horno precalentado durante unos 10-12 minutos o hasta que los bordes estén ligeramente dorados.
  12. Retira las galletas del horno y déjalas enfriar en la bandeja durante unos minutos antes de transferirlas a una rejilla para enfriar completamente.

¡Listo! Ahora puedes disfrutar de estas deliciosas galletas de mantequilla con un vaso de leche o tu bebida favorita. Puedes guardarlas en un recipiente hermético para mantener su frescura. ¡Buen provecho!